CodeBox.es

Actualidad, Tecnología, Marketing y más

persona-con-calor
Actualidad

¿Cómo enfriar una habitación calurosa?

Con la llegada del verano y el aumento del calor, es necesario disfrutar de un espacio fresco y confortable. Si no tienes un aire acondicionado en casa, cuentas con otras formas de enfriar una habitación calurosa, y conseguir que el calor no sea un problema durante el verano.

Aunque el verano es una de las épocas más esperadas en el país, las altas temperaturas son un problema si no cuentas con un aire acondicionado, ya que sufrirás de un enorme calor que se adueñará de toda la vivienda.

Consejos para enfriar una habitación donde no se pueda descansar por el calor

Sin embargo, hay varios métodos que te ayudan a bajar la temperatura de la habitación, y disfrutar de un ambiente más fresco para soportar la ola de calor del verano.

1.      Cortinas cerradas y persianas bajadas

Lo primero que debes hacer para reducir la temperatura de una habitación es cerrar las cortinas y bajar las personas durante el día, más que nada en las horas donde el espacio recibe más luz directa del sol.

Cuando evitas que los rayos de sol entren en casa, consigues que la temperatura no aumente, conservando un nivel agradable. Si tu vivienda está orientada hacia el este, el sol es más directo durante la mañana, en caso contrario, si está orientada al oeste, el sol es más fuerte a las tres de la tarde.

Vuelve a abrir las cortinas y subir las persianas cuando el sol se marche, o ya durante la noche. Incluso las puedes mantener abiertas durante la madrugada para que círculo el aire frío, y disfrutar de una temperatura más agradable.

2.      Aparatos para circular el aire

El ventilador es el primer equipo en el que piensas cuando quieres refrescar la habitación si no tienes aire acondicionado. Sin embargo, no debes encenderlo durante mucho tiempo, ya que el motor generará calor.

Cuando lo uses, evita que el aire llegue directo a tu cara y coloca un bol metálico con hielo y sal gruesa para refrescar el aire que circula. Recuerda que el ventilador lo que hace es empujar el aire caliente, no lo enfría.

Otra opción popular es el vornado, y es que se trata de un equipo que ayuda con la circulación de aire en la habitación. Toma el aire frío cercano al suelo y lo hace circular por el espacio, bajando la temperatura entre 4 a 6 grados, en comparación con el exterior.

Lo debes colocar en una esquina de la habitación, siempre a la sombra, y apuntar el flujo de aire hacia la esquina superior contraria. Gracias a esto, consigues una circulación de aire frío más óptima que genere una sensación térmica más baja.

3.      Utiliza el agua de varias formas

Durante el verano, es muy recomendable beber agua regularmente durante el día y la noche. Mantenerte hidratado evitará los efectos secundarios de estar en un ambiente caluroso.

También se recomiendan las duchas de agua templada antes de dormir, incluso meter los pies en remojo. Con esto te sentirás más fresco, y puedes conseguir un descanso más agradable y profundo.

El agua la puedes usar de otras formas, como fregar el suelo con ella antes de acostarse, así como en la terraza, para que bajes unos cuantos grados la temperatura de la habitación.

Además, regar las plantas con agua sobre el abono ayuda a refrescar el ambiente cargado de calor. Un truco muy útil es dejar un barreño de agua, y rellenarlo cada vez que se evapore.

Aplicando estos diferentes métodos, tienes la oportunidad de bajar la temperatura en una habitación sin la necesidad de usar un aire acondicionado, logrando un ambiente más fresco que te permita soportar las olas de calor durante el verano.

¿Por qué es importante una buena temperatura en casa?

Hay varios motivos por los cuales es importante conservar una buena temperatura en casa durante el verano. Por tal motivo, es necesario que apliques los métodos antes descritos, si no cuentas con un aire acondicionado que climatice la habitación.

Las altas temperaturas terminan por afectar el bienestar de tu familia, provocando dolor de cabeza, una sed intensa, la sensación de desmayo y hasta el cansancio extremo. Son problemas que pueden agravarse y afectar de manera negativa su salud.

De igual manera, el cambio de temperatura que se sufre cuando se pasa del exterior al interior de la vivienda, tiene una variación de hasta 15°C, lo que aumenta las posibilidades de sufrir de resfriados o infección en la garganta.

persona-con-calor

Los lactantes, personas mayores a 60 años, o con enfermedades crónicas, son más propensas a sufrir de estos problemas.

Además, los equipos electrodomésticos pueden sobrecalentarse por causa del excesivo calor, esto termina por dañarlos, ocasionando un coste alto en su reparación o en la compra de uno nuevo.

Los sistemas y equipos eléctricos trabajan de manera excesiva, como es el caso del refrigerado o del ventilador, por ejemplo, provocando cortocircuitos que terminan por dañarlos, y hasta aumentando las posibilidades de sufrir un incendio.

Si la vivienda es de madera, está expuesta a contraerse las vigas por el excesivo calor, generando grietas que se intensifican por causa de los cambios de humedad y el calor, deteriorando las uniones de las vigas, paredes y suelos.